Es cierto que hay alguien que arroja un vidrio en la playa;
pero también es cierto que hay otro que se agacha a recogerlo.
pero también es cierto que hay otro que se agacha a recogerlo.
En 1980 cuando tenía 14 años, escribí una frase en un cuaderno porque me gustaba y no quería olvidarla o perderla. Hoy día sigo coleccionando esos pensamientos que quiero guardar e imagino que esta es una buena manera de hacerlo.